Historiadora de alma, vida y corazón
Una mujer encantadora, así fue Eva Gómez de Henríquez, cuyas cualidades de sencillez, amabilidad y bondad, irradiaron la vida de la dama samaria Eva Gómez de Henríquez, apasionada de la historia, el arte y la cultura, quien falleció este jueves.
Ella era una enamorada de la vida, quien nos enseñó a vivenciar la historia con otros ojos, más allá de fechas, a experimentarlos como esos sucesos, donde aprendemos a construir sociedad.
Evita, fue una historiadora de alma, vida y corazón, muy cercana al Museo Bolivariano de Arte Contemporáneo Quinta de San Pedro Alejandrino, sobresalió como miembro de la Sociedad Patriótica Bolivariana de Santa Marta y la Academia de Historia del Magdalena.
Se destacó como una defensora del legado bolivariano, una mujer sabia, con una inteligencia especial. Ese sentir cálido, lo irradiaba en cada conversación, cada dialogo con Evita se convertía en un interesante andar y conocer.
Evita, fue una comprometida con la nueva generación, nuestros jóvenes en cada Simposio, se sorprendían con el manejo de sus conceptos, y la defensa de la historia.
La sociedad samaria, no solo pierde una dama sensible, de un exquisito buen humor, que encantaba con cada palabra o frase que salía del centro de su corazón.
El equipo de trabajo del Museo Bolivariano de Arte Contemporáneo Quinta de San Pedro Alejandrino, lamenta profundamente su sensible fallecimiento, en estos momentos de dolor, expresan sus condolencias a sus hijos, nietos y demás familiares, reconociendo en ella una excelente madre y abuela.
Evita, está hoy en la presencia del Señor, de ella guardaremos los mejores recuerdos, que serán celosamente cuidados como tesoros hermosos que quedan perenne en nuestras mentes y corazones.
Al Todopoderoso, rogamos por su eterno descanso y fortaleza a su familia ante sensible pérdida.
