Zarigüeya
Silenciosa y nocturna
ZARIGÜEYA
‘Silenciosa y nocturna’
Descubre:
Conocida en diferentes lugares como zarigüeya, tlacuache, chucha común, fara o zorrochucha en algunas regiones de América. Es un importante mamífero marsupial que capta la atención e interés por sus particulares características y fascinante comportamiento.
Su apariencia física es única de aspecto particular, de hocico agudo y ojos pequeños, su cuerpo posee abundante pelo gris o blanco, una larga cola prensil, permitiéndole trepar y equilibrarse. Así mismo, cuenta con una bolsa marsupial, similar a la de los canguros, donde se desarrollan las crías durante cierto tiempo.
Distribución
La zarigüeya es apreciable sobre áreas boscosas secas tropicales, en áreas urbanas y suburbanas. Ha logrado adaptarse a variadas condiciones ambientales en América como selvas húmedas y zonas áridas. Al interior del Jardín Botánico Quinta de San Pedro Alejandrino puede ser visible en espacios aislados del tránsito humano, propiamente en los remanentes bosques de este lugar.
Es un animal nocturno y solitario, lo que significa que la caza es practicada regularmente de noche con poca perturbación. Su alimentación se basa principalmente en el consumo de variados alimentos representados en frutas, insectos, mamíferos y carroñeros.
Utilidad
Al tener hábitos alimenticios basados en frutas y consumo de animales en descomposición, es catalogada como un animal de importancia ecológica, al tiempo que contribuye al mantenimiento del equilibrio de los ecosistemas al regular poblaciones de insectos y roedores al consumirlos.
Culturalmente, la zarigüeya ha dejado una marcada huella en la literatura y tradiciones populares, específicamente sobre culturas indígenas, donde le confieren ciertas cualidades y significados simbólicos.