Especie del Mes
El totumo (Crescentia cujete L.) es una de esas especies que durante años ha estado inmersa dentro del listado de plantas iconos en el Caribe Colombiano, sin desconocer su presencia a lo largo de Centroamérica y toda América Tropical por debajo de los 1.500 m de altitud.
Desde siempre la humanidad ha vivido en dependencia con su entorno natural, siendo las plantas unos de esos recursos apropiados para la satisfacción de necesidades de vivienda, alimento, salud, energía, vestuario y estética, con un mayor aprovechamiento de sus utilidades, botánicas y hasta etnobotánicas sin descartar su valor económico y recreativo.
Totumo Crescentia cujete
Tradicionalmente ha estado asociado a la cultura costeña por su utilidad medicinal, artesanal y alimentaria para el caso de los animales. Por ello, en los extensos bosques secos es fácil encontrar el cultivo del totumo como una alternativa de solución ante la escasez del pasto, durante los marcados periodos de sequía presentados en la región.
• Su pulpa se utiliza en ocasiones con fines medicinales como laxativo o expectorante, al parecer en la antigüedad era utilizada como alimento por ciertas tribus.
• Su madera se utiliza para la elaboración de artesanías, fabricación de herramientas e implementos agrícolas e instrumentos musicales.
• Su propagación se da a través de semillas y su cultivo en climas cálido sobre suelos drenados.
• Actualmente es utilizado al interior en ciudades como planta ornamental, de interés para muchos por la belleza y lo curiosos de su fruto.
• Es fácil encontrar el nombre de totumo asignado a poblaciones, formaciones geográficas, leyendas, festivales, mitos y leyendas, etc.
• Frecuentemente usado como jarabe para tratar afecciones pulmonares al usar su pulpa mezclada con caraguala y anís estrellado.
• En la Sierra Nevada de Santa Marta el totumo es utilizado por la comunidad indígena Arhuaca para la elaboración del poporo (recipiente de utilidad espiritual).
Los visitantes podrán encontrar esta planta al interior de la Quinta de San Pedro Alejandrino al iniciar el recorrido por la Plaza de las Banderas como también sobre jardines externos del Museo Bolivariano de Arte Contemporáneo.
